Protección de marcas
Las marcas existen desde hace mucho en todo el mundo y permiten a los clientes y consumidores orientarse fácilmente en el mercado a la hora de adquirir productos y servicios. Por norma general, a determinadas marcas se asocian características de calidad, como una relación calidad-precio ventajosa, una política empresarial positiva, sostenibilidad, una imagen progresista u otros valores significativos.
Para el propietario, una marca famosa es un importantísimo activo financiero y, por ende, un factor decisivo para su posicionamiento en el mercado. Principalmente, las marcas sirven para identificar la procedencia de la mercancía y servicios de una empresa, y diferenciarlos de la oferta de la competencia. Los beneficiarios de la protección son los distintivos, como por ejemplo, palabras, letras, números, imágenes, colores, hologramas, distintivos multimedia o tonos, incluidas las combinaciones de estos elementos.
Según las leyes y directivas vigentes, una marca denominativa no requiere de un diseño gráfico o un color; más bien se compone de caracteres, como por ejemplo, letras, números y caracteres especiales seleccionados. Una marca denominativa puede constar de una o varias palabras o también de una sola letra. Si la marca denominativa se ha registrado en la Oficina Alemana de Patentes y Marcas (DPMA), se presenta con una impresión armonizada; a pesar de que la protección de marca abarca todas las formas de expresión y tipos de letra. Esto también incluye diversas grafías o combinaciones de mayúsculas y minúsculas.
Si una marca contiene elementos no admisibles para una marca denominativa o esta los regula, puede tratarse de una marca denominativa/figurativa o de una marca figurativa. Esto se aplica en especial cuando quien solicita que se registre su cadena de caracteres hace valer un diseño de fuente, color u orden de las grafías especial o cualquier combinación de elementos gráficos, es decir, cuando lo determinante es una determinada impresión visual.
En el caso de las marcas denominativas/figurativas son posibles las siguientes variantes:
- Palabras y/o símbolos en un determinado tipo de letra y grafía
- Combinación de letras/símbolos y elementos gráficos
- Disposición en varias líneas o con escritura espaciada (palabras escritas con espacios en blanco entre las letras)
En principio, la validez de una marca registrada es de diez años. Este plazo de protección puede renovarse por otros diez años consecutivamente previo abono de la tasa correspondiente. Si la marca no se renueva, se borra de la Oficina de patentes y marcas. La protección de la marca también se extingue si otros titulares de marcas ejecutan con éxito un procedimiento de oposición o de cancelación. Además de esto cabe tener en cuenta que la marca también debe usarse en su clase asignada, porque de lo contrario existe peligro de cancelación de la marca. Aunque esto solo se aplica una vez transcurrido el periodo de gracia de cinco años después de registrar la marca.
Solicitud de marca
Hace mucho que la protección de las marcas dejó de ser prerrogativa exclusiva de las grandes empresas. Ahora, las asociaciones, partes interesadas o personas privadas también pueden ser titulares de marcas. En función de la región en la que desee protegerse la marca, debe presentarse una solicitud en la Oficina Alemana de Patentes y Marcas (DPMA) o en la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO, hasta 2016 «Oficina de Armonización del Mercado Interior» (OAMI)), algo que puede hacer todo el mundo.
Además, a partir de una marca básica puede solicitarse protección internacional a la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). Los costes inherentes a la inscripción de la marca en el registro de marcas varían en función de si se trata de una marca alemana o de una de la Unión Europea.
Actualmente, para la solicitud y registro de una marca alemana, la DPMA cobra 300 euros o 290 euros en caso de solicitud electrónica. Esta cantidad incluye una tasa por clase de hasta tres clases de productos o servicios. Si el solicitante de la marca desea registrar la marca para otras clases, al presentar la solicitud deberá abonar una tasa adicional de 100 euros por cada clase adicional. Las clases representan los ámbitos reclamados para la marca y por ende determinan fundamentalmente el alcance de la protección de la marca. La relación de productos y servicios es el punto de partida para la asignación de una marca a una clase y su registro en ella. Con una base de datos armonizada para la clasificación, que encontrará en la página de la DPMA, podrá buscar y clasificar los productos y servicios, y conseguirá mayor seguridad jurídica y transparencia.
Desde la presentación de la solicitud en la DPMA hasta el registro de la marca suelen transcurrir entre diez y doce meses aproximadamente. Sin embargo, es posible acelerar el examen de la solicitud de marca abonando una tasa de aceleración de 200 euros. En tal caso, la decisión sobre la solicitud debe tomarse en un plazo de seis meses y el solicitante deberá participar en el proceso.
La tasa de renovación para hasta tres clases asciende a 750 euros (cada clase adicional: 260 euros) y debe abonarse transcurrido el plazo de protección de diez años.
Para solicitar y registrar marcas de la Unión Europea, la EUIPO cobra una tasa de solicitud de 850 euros. La tasa solo incluye el registro de la marca en una clase. La tasa para la segunda clase de productos y servicios es de 50 euros, y para cada clase adicional se recauda una tasa adicional de 150 euros. El ámbito de aplicación de una marca de la Unión Europea registrada es el mercado interior de la Unión Europea.
Antes de solicitar una marca, se recomienda contratar un asesoramiento legal competente y profesional, y sobre todo, investigar si la marca que desea solicitarse se está utilizando ya en una forma similar o incluso si es ilícita. Si una marca no fuera registrable y la Oficina de Patentes y Marcas denegara su registro, las tasas ya abonadas no se reintegrarían.
Además, tras publicar el registro de una nueva marca, los titulares de marcas anteriores pueden presentar oposición si la nueva marca atenta contra sus propios derechos de marca. Existe un elevado riesgo de recibir costosas amonestaciones debido a que en muchas ocasiones se desconocen los derechos de marca de pequeñas y medianas empresas, motivo por el cual pueden producirse colisiones entre los nuevos registros y los derechos existentes. Por norma general, al solicitar una marca, las autoridades no llevan a cabo este tipo de comprobaciones. Por lo general, los titulares de marcas que consideren que se ha atentado contra sus derechos dirigirán una amonestación por infracción de marca, aunque (en casos graves) también pueden solicitar un interdicto.
Autoridad competente para el registro de marcas:
- Oficina Alemana de Patentes y Marcas (DPMA) - competente para el registro de las marcas nacionales en Alemania
- Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) – Inscripción en el registro con validez en todos los Estados miembro de la Unión Europea
- El registro internacional (RI) puede solicitarse ante la World Intellectual Property Organization (WIPO, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual) partiendo de una marca básica y tiene validez en todos los signatarios del Acuerdo de Madrid
Litigio
Para actuar con éxito contra las infracciones de marca o la piratería, antes es necesario proteger exhaustivamente la propiedad intelectual y derechos de propiedad industrial de uno. Si las propias ideas y desarrollos no cuentan con la suficiente protección, se abre las puertas a los falsificadores para que realicen falsificaciones sin que esto pueda perseguirse por la vía penal, a excepción de las evidencias de falsedad.
En función del contenido concreto que deba protegerse, el legislador prevé una amplia serie de derechos de propiedad industrial para proteger la propiedad intelectual y gestionar las demandas que surgen en estas circunstancias. En este contexto adquieren especial relevancia los derechos de marcas, diseños industriales, patentes y modelos de utilidad, así como los derechos de autor, que conceden a su respectivo titular el derecho a prohibir el uso a terceros no autorizados.
Además de las posibilidades de interponer una demanda civil y penal o una amonestación y de solicitar un interdicto, también existe la opción de requerir una intervención aduanera para retirar las copias pirata y falsificaciones de la circulación de manera rápida y económica. La aduana es quien ejecuta las intervenciones aduaneras en caso de sospecha de infracción de los derechos de propiedad industrial de terceros. Se puede intervenir mercancía destinada tanto a la importación como a la exportación.
Investigaciones
Antes de solicitar una marca, siempre debería realizarse una investigación de mercado exhaustiva para determinar si la marca puede registrarse y que no colisiona con los derechos de otros titulares de marcas. En ese momento también debería establecerse en qué listas se registrarán los productos y servicios (clases) y en qué países se desea proteger la marca.
Realizar uno mismo una búsqueda gratuita con buscadores, en la base de datos de la DPMA o bien en las bases de datos de las autoridades internacionales puede arrojar luz sobre la existencia de similitudes notables con marcas existentes, pero en última instancia no reemplaza la búsqueda por parte de expertos y peritos ni la evaluación por parte de estos en caso de posibles similitudes y solapamientos.
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